5 errores que pueden afectar la rentabilidad de flotas
Te contamos los desaciertos más comunes que pueden afectar la rentabilidad de flotas, así como la mejor forma de prevenirlos
Reducir o eliminar riesgos asociados a la inversión de vehículos, parte de una adecuada y óptima gestión de flotas, un escenario del que ya te hablamos hace un tiempo a través de ‘Cómo reducir los costos de tu flota hasta un 20%’.
Ahora, aterrizamos el asunto en el contexto de los errores más usuales que hay en la dirección de una flota, un hecho que pocos gestores toman en cuenta y afecta considerablemente su rentabilidad.
1. Pasar por alto el mantenimiento
Evitar accidentes, desgaste y problemas mecánicos, parte de un óptimo mantenimiento preventivo que muchas empresas no consideran como parte de la gestión de flotas.
La pérdida de tiempo en un escenario evitable, repercute negativamente en la rentabilidad de un grupo de vehículos, un hecho que a la larga suma muchas pérdidas en el tiempo.
En CarSync Fleet encontramos una forma práctica de programar los mantenimientos de una flota a través de alertas, esto con el fin de estandarizar y prevenir cualquier olvido o contratiempo. Puedes hacer clic aquí para obtener más información.
2. Optar por vehículos inadecuados
Sea por la configuración o la oferta del concesionario, en ocasiones se toma una mala decisión en la compra de unidades.
Recuerda que es mejor invertir en vehículos que se adapten y cumplan con los requerimientos de tu empresa, a comprar ejemplares a un costo menor cuyo rendimiento puede resultar perjudicial para tu negocio.
Tip: Antes de comprar una flota de vehículos, conoce muy bien tu operación e investiga mucho sobre las opciones disponibles en el mercado. El valor comercial de las unidades no es un factor que debas tomar en cuenta. Apuesta por su calidad y rendimiento.
3. No estar al tanto de la forma de conducción
Muchos gestores de flotas se preguntan porqué deben considerar el comportamiento tras el volante como un factor que puede afectar el rendimiento de su flota.
En realidad, las razones son puntuales. Conocer la forma en cómo conduce una persona te permite tomar el control de:
- Prevención de multas de tránsito.
- Seguridad vial.
- Ahorro de combustible.
Recuerda que la recopilación de datos de conducción es posible gracias a tecnología avanzada que pueda procesar todo estos datos. Puedes ingresar aquí para conocer más sobre cómo obtener esta información.
4. Evadir el reemplazo de la flota
Aunque se trate de una inversión grande, no hacerlo puede resultar aún más perjudicial. Las flotas no son eternas y si bien el mantenimiento preventivo juega un rol importante, el reemplazo o cambio de unidades es inminente.
Más temprano o tarde que otros, el reemplazo a tiempo de la flota te evitará de mayores problemas como costos de mantenimiento, un elevado consumo de combustible e incremento de riesgos o accidentes durante la operación ¡Estás advertido!
5. Creer que la tecnología no ayuda
A estas alturas del juego, toda gestión de flotas debe trabajar de la mano de tecnología.
Los resultados son 100% beneficiosos: optimización del tiempo de trabajo, reduce riesgos propios de la gestión y obtienes datos relevantes sobre todo el proceso.
Y lo mejor de todo es que puedes monitorear todo ello una tablet, ordenador ¡o smartphone! Te invitamos a hacer clic aquí y comprobar la experiencia.